Después de una nada corta pausa navideña,
comienza la segunda vuelta de la Ligue 2 francesa. Y en el Stade Sébastien Charlety quemarán los turrones y la
bûche de Nöel dos equipos inmersos en dinámicas opuestas.
El Paris FC es probablemente el equipo revelación de la temporada.
El año pasado jugaba en la división inmediatamente inferior, la Nationale (algo así como la segunda B española) y aunque terminó en puesto de promoción de ascenso, perdió la eliminatoria con el Orléans. Pero he aquí que, al cabo de un mes de finalizar la competición, la Comisión Nacional de Control de Gestión decretó el
descenso administrativo del Bastia F.C. de la Ligue 1, donde terminó último,
directamente a la Nationale porque el club corso no ofrecía garantías financieras para participar en la Ligue 2. Y así es como, sin comerlo ni beberlo,
el Paris pasó a ocupar la vacante y ascendió de categoría. Con este antecedente, era de esperar un equipo que, sin apenas tiempo para digerir, mentalizar ni preparar el imprevisto ascenso, zozobrase en la nueva categoría. Sin embargo, terminada la primera vuelta
ocupa la sexta posición y empatado con los tres equipos que le preceden, AC Ajaccio, Le Havre y Brest,
todos ellos con 34 puntos y disputándose el puesto de promoción para ascender a la máxima categoría, la Ligue 1.
Nueve victorias, siete empates y tres derrotas son sus credenciales.
En casa, seis victorias, tres empates y una única derrota. Antes de empatar su último partido en casa, contra el Lens, era el mejor local de la categoría. Ahora es el sexto mejor equipo jugando en casa, pero empatado con los tres predecesores y a un solo punto de la cabeza de la tabla.
El visitante, Bourg Péronnas, es un equipo muy modesto que sólo lleva tres temporadas en la Ligue 2. La temporada de su ascenso, 2015/16, terminó en undécima posición. La siguiente, 2016/17, acabó decimoquinto, a seis puntos del descenso. Y esta temporada tendrá que mejorar mucho, sobre todo como visitante, si quiere eludir el regreso a la Nationale.
Ocupa en estos momentos la decimooctava posición, a dos puntos de la permanencia.
Sus números fuera de casa son un completo desastre: una victoria y nueve derrotas. Para colmo, esa solitaria victoria queda muy lejos ya, ocurrió en la segunda jornada allá por el mes de agosto, y sin pretender desmerecerla hay que apuntar que la víctima, el Quevilly Rouen, ocupa actualmente el decimonoveno puesto y es otro firme candidato al descenso. Desde aquella lejana victoria, Bourg Péronnas
encadena ocho derrotas consecutivas como visitante, y no por la mínima precisamente.
Vamos con los resultados de ambos contendientes (resultados en casa los del Paris y fuera los de Bourg Péronnas) ordenados por clasificación de equipos
Los parisinos no son un equipo excesivamente goleador a domicilio. En la clasificación de goles, como locales están exactamente en la mitad de la tabla, ocupando la décima posición.
Con quince goles en diez partidos, presentan un promedio de 1'5 goles exactos por partido, exactamente la línea que buscamos.
De los diez partidos jugados en casa, en cinco de ellos se cumplió nuestro pronóstico. Sólo es un 50%, pero he querido presentar los resultados ordenados según la clasificación para evidenciar que
en todos los partidos que el Paris ha jugado con los equipos de la parte baja de la tabla, lugar que ocupa Bourg Péronnas, se ha cumplido el pronóstico: victoria local y más de 1'5 goles.
Pero si los números del Paris pueden generar ciertas dudas,
los resultados de Bourg Péronnas constituyen un argumento mucho más convincente: en las nueve derrotas fuera de casa se marcaron más de 1'5 goles. Sí, sí, en todas las derrotas, sin importar si el contrincante es de la parte alta, media o baja de la tabla. La estadística es absolutamente demoledora.
Con veintiseis goles en diez partidos, es el visitante más goleado de la categoría (2'6 goles por partido).
En resumen, por estado de forma, dinámica y resultados de ambos equipos considero plausible la victoria local por dos o más goles. El principal inconveniente, en mi opinión, la rotura del ritmo de competición que supone un parón tan prolongado. Crucemos los dedos.
Un saludo a todos y mucha suerte en vuestros pronósticos.