Pelea en la división de peso semipesado de la UFC.

Cirkunov llega a esta pelea con un récord de MMA de 15-8 y de 6-6 en la UFC. Cirkunov tiene un promedio de 3,87 golpes significativos por minuto y una precisión de golpeo del 51%. Está absorbiendo 3,00 golpes y tiene una defensa de golpeo del 57%. Su capacidad de agarre es buena, con una media de 4,25 derribos por cada 15 minutos y 1,8 intentos de sumisión durante el mismo periodo de tiempo. Su precisión en los derribos es del 43%, pero su defensa en los derribos es del 76%.

Menifield llega a este combate con un récord de 12-3 en MMA y de 7-3 en la UFC. Menifield tiene un promedio de 3,88 golpes significativos por minuto y una precisión de golpeo del 56%. Absorbe 3,23 golpes y tiene una defensa de golpeo del 53%. Su capacidad de agarre es más pobre que la de Cirkunov, pero se puede defender, con una media de 0,82 derribos por cada 15 minutos. Su precisión en los derribos es del 30% y su defensa en los derribos es del 83%.

El dato más relevante de esta pelea es el regreso de Cirkunov a peso semipesado, ha venido compitiendo ultimamente en peso medio, pero sin mucho éxito puesto que llega encadenando derrotas consecutivas, vuelve a subir kilos para intentar estabilizar su trayectoria (supone una diferencia de 20 libras entre una categoría y otra, en torno a 10kg). Menifield por contra, está asentado en la categoría, y salvo algún combate que no ha ido como esperaba, como fue contra Knight, el resto han sido ganados con contundencia.

Ya en rueda de prensa Menifield ha dicho que buscará el finish para escalar en el ranking, puesto que ahora mismo, aunque ganando, no estaba haciendolo de forma contundente para impresionar a los jefes, por ello, se da la mezcla perfecta para que el estadounidense pueda ganar al canadiense antes de decisión de los jueces.