Partido de la NCAA, nos vamos a la Big Ten donde los Wisconsin Badgers viajan a Bloomington para enfrentarse a los Hoosiers de la universidad de Indiana.

En cualquier deporte universitario nunca se puede decir que algún equipo no se juega nada, pero aquí yo creo que un equipo se juega mucho más que otro. Indiana (13-14, 4-12) está en la peor temporada que yo le he visto, antepenúltimo en la B1G y con la única opción de jugar en el March Madness si gana el torneo de conferencia, cosa que sería un milagro.

Wisconsin (19-8, 11-5) está por encima de lo esperado en este equipo, #19 del país y colocado por muchos como seed #4 en el March Madness, pero para mantener esas previsiones hoy sin duda tiene que ganar a uno de los peores equipos este año de la B1G.

Los Badgers ponen hoy mucho en juego, primero mantener la lucha con Maryland por un cuarto puesto de la Big Ten que les evitaría dos rondas en el torneo de esta conferencia y segundo subir o por lo menos no bajar ese seed #4 que permite en principio evitar en las dos primeras rondas del torneo a cualquier equipo de los imposibles.

Stake bajo porque Wisconsin es un equipo complicado y los Hoosiers parecen dar algo de señales de vida tras presentar batalla a Iowa y Purdue. Pero aún así la trayectoria de Indiana es horrible, una victoria en sus últimos trece partidos lo preceden y lo que es peor contra equipos del calibre de Nebraska, Northwestern y... Rutgers.

Hoy deberían sufrir contra un equipo ultradefensivo de los Badgers que llega aquí como decimosexta mejor defensa de la NCAA y al que en la B1G tan solo Purdue y Míchigan State han sido capaces de hacerle más de 65 puntos, eso debería ser demasiado para un equipo de Indiana que ha promediado un 35% de acierto en sus tres últimos partidos y en el que Romeo Langford parece haber dado un bajón en su juego.