¡¡Vamos Nico!!! El guerrero Massú me metió de lleno en este mes nefasto que atravieso, y quiero completar la cuadratura del círculo haciendo que el propio tenista chileno me saque del atolladero. Vamos con él a muerte en este encuentro perteneciente a la primera ronda del Challenger de Salinas (Ecuador) sobre tierra batida.

Massú se las verá con Renzo Olivo, un joven argentino situado en el 272, puesto además más alto de su carrera. No me parece nada peligroso, es un jugador de Futures al que ya le cuesta a nivel Challenger, cuánto más si se enfrenta a alguien que le podría tener de hijo, con la categoría que atesora. Massú ya dijo que a partir de ahora todo torneo a que se presentara significaba que estaba bien, que solo quiere disfrutar del tenis. Le vimos este año ganar a un tenista superior a Olivo como es Velotti con facilidad (6-3 y 6-2) y pelear hasta el final de los terceros sets con dos top100, uno en ciernes y otro consolidado, como Delbonis y Montañés.

Con esos antecedentes, a poco que Massú esté en buena forma le pasa la mano por la carita a Olivo. El argentino no tiene muchos recursos, buen jugador de fondo sin más. Terrícola, nunca ha jugado un partido a nivel ATP y en challenger tiene un pobre 5-12 en esta superficie, habiendo caído en sus participaciones más reicnetes con gente del nivel de Reister o Campozano, por lo que me parece una víctima más que asequible para EL GRAN NICO MASSÚ.