Tras dos semanas consecutivas ganándolo todo y levantando dos trofeos Challenguers en su país, Bonzi renunció a competir en Metz y viajó hasta Astaná, una cita a la que llega justo de fuerzas y en la que dudo que esté para competir al cien por cien ante el finlandés.
Y es que Bonzi además ha tenido mala suerte porque se enfrenta a uno de los destinados a animar el torneo, al joven y talentoso jugador finlandés al que muchos apuntan como una de las grandes promesas de la Next Gen.
Sinceramente no sé qué se le ha perdido a Bonzi aquí y porque no está con el resto de compatriotas en Metz pero por las circunstancias y por el rival está claro que lo más aconsejable es layearle mañana.