Nos vamos a los cuartos de final del Challenger de Colombus donde medirán fuerzas el danés Mikael Torpegaard (167) ante el nacido en Ecuador Roberto Quiroz (249). Será la primera vez que se vean las caras.

Si bien Torpegaard está pasando ahora mismo por el mejor momento de su carrera en cuanto a ranking se refiere, no vienen siendo fácil los últimos meses para él. Desde el Challenger de Colombus (2), donde fue el campeón, curiosamente no ha conseguido llegar ni siquiera a una tercera ronda de los torneos que se han disputado.Y es que el danés es un tenista que tiene unos números bestiales cuando juega en Hard Indoor, donde justamente se está llevando a cabo este certamen. En pistas de esta condición, este año ha jugado 25 partido y perdió en solo 6 de ellos; agregar que fue campeón en el torneo previamente mencionado y también a inicio de temporada fue finalista en Cleveland y Colombus. Curioso, las 3 veces que jugó en Colombus tuvo resultados y rendimientos buenísimos.

Si Mikael lleva dos meses complicados hay que decir que del otro lado su rival lleva un año entero con unas sensaciones horribles. La última vez que hizo algo decente fueron en esos cuartos de final en el Challenger de León, pero estamos hablando de hace 5 meses. Aquí ha vencido en segunda ronda a James Trotter, que es 1300 del mundo, y luego despachó en tres sets al estadounidense Donald Young,quien apenas ganó 4 de los últimos 13 partidos a nivel Challenger en los últimos 5 meses; victorias ante rivales como Peliwo, Escobar, Olivo y Bangoura... ninguno de ellos ubicados ni entre los mejores 250 del mundo.

La diferencia de nivel es clara, esa es la realidad. Torpegaard se siente realmente cómodo cuando juega en este tipo de pistas y así lo reflejan sus números. Las sensaciones en este torneo están siendo muy buenas; queriendo retomar esa confianza perdida. Quiroz, por su parte, ha llegado hasta aquí gracias a lo lamentable de sus rivales más que por mérito propio. Si ambos juegan como lo vienen haciendo en este tipo de superficies, no debería tener problemas el danés para hacerse con el partido. Vamos con stake 1.