Australia Open, primer Grand Slam del año, Hard Outdoor. Ayer se inauguró el cuadro principal de este torneo y hoy tendremos los encuentros que restan para completar la primera ronda. En uno de ellos nos encontramos el duelo entre dos tenistas que llegan procedentes de la previa, Stephane Robert y Bjorn Fratangelo.

Stephane Robert - 35 años - nº 225 del ranking ATP.

El francés es un tenista que parecía tocado tras tener que perderse la mitad de 2014 por una lesión y sin conseguir arrancar en su vuelta, pero un buen final de año, con la final en el Challenger de Hua Hin dónde ganó a rivales de la talla de E. Donskoy o T. Ito, le valieron para dar un salto en el ranking y poder estar disputando la previa de este Grand Slam. Robert es un tenista todoterreno, que le hemos visto moverse bien por cualquier tipo de superficie. En este 2015 tiene un registro de 4-1, cayendo en 2R del Challenger de Bangkok ante Y. Uchiyama por 6-2 7-6, tras ganar a A. Ghem 6(3)-7 7-6(4) 6-3, y pasando la previa de este torneo venciendo a A. Bolt 3-6 6-2 6-2, I. Sijsling por doble 7-5 y a K. Khachanov 1-6 6-4 6-2.

Bjorn Fratangelo - 22 años - nº 132 deñ ranking ATP.

El americano es una de las muchas promesas que vienen pisando fuerte del territorio americano. Quizá no apunte tan alto como otras, pero creo que es un jugador que tiene futuro a nivel ATP. Es un tenista que no se parece en nada al típico perfil americano, ya que su tenis se basa en la solidez y en dominar en los intercambios. Es por eso que tiene buenos registros también sobre tierra batida, sobre todo a nivel ITF. Fratangelo llega a este cuadro principal de este torneo por primera vez en su carrera y en calidad de Lucky Loser, ya que él tras ganar a F. Dancevic 7-6 6-1 y a O. Roca 3-6 6-3 6-2 caería ante el británico D. Evans 5-7 6-4 0-6. Antes de venir a Melbourne había caído 6-3 3-6 6-3 ante A. Whittington en el Challenger de Happy Valley.

Si bien pienso que Robert es merecidamente favorito, no creo que sea lo suficientemente sólido ni constante como para ser superior a su rival durante 3 sets consecutivos. Las condiciones de extrema calor, el cansancio acumulado tras pasar la previa (recordemos que tiene 35 años y el físico no es su fuerte) y jugar ante un tenista que no va a rehuir de los largos intercambios deberían ir en su contra. Además vemos que todos sus encuentros de este 2016, tanto los suyos como los de Fratangelo, siempre han sido muy igualados, 3/4 en 3 sets para el americano y 3/5 para el francés. En mi opinión ninguno de los dos es tan superior al rival como para vencerle de forma cómoda y espero un partido largo.