Partido amistoso entre las selecciones de Filipinas y Malasia que se disputará en el Rizal Memorial Stadium de Manila.

Ambas selecciones tienen este partido como preparación para la clasificación para la Copa de Asia 2019 que comenzarán a disputar el día 27 unos frente a Líbano fuera de casa, y los locales frente a Nepal.

Se trata de un partido con especial trascendencia para los filipinos con opciones realistas de clasificación para la Copa de Asia de 2019 y seriamente castigados y criticados tras la mala participación en la Copa Suzuki del 2016 que organizaron. El propio seleccionador filipino ha hablado de la trascendencia de vencer este choque ante un rival del Sudeste Asiático y de lograr la clasificación para el torneo, con el objetivo de agradar a la afición puesto que según él "peligra el futuro del fútbol en Filipinas", un deporte en retroceso ante los malos resultados.

La realidad es que la selección de Filipinas viene en una fase de crecimiento importante. Con la recuperación de los expatriados filipinos por el mundo se está montando una selección bastante aceptable que obtuvo unos resultados bastante dignos en la clasificación para el Mundial, llegando por momentos a ocupar puestos de clasificación en un grupo complejo con equipos como Corea del Norte, Bahrein o Uzbekistán de más nivel. Para este partido, los Azkals cuentan con toda su artillería: los Younghusband, Patiño (ex del Córdoba), Etheridge, los Ott, Bahadoran...

Malasia, en cambio, a pesar de realizar una Copa Suzuki de un nivel similar (ambos quedaron eliminados en primera ronda, pero mientras Filipinas estaba encuadrada en el grupo de la muerte el de Malasia era de un nivel bastante más bajo), es una selección de un nivel bastante bajo. Encuadrada en un grupo con selecciones como Palestina, Emiratos Árabes Unidos o Arabia Saudí no fue competitiva en ningún momento, sorprendiendo especialmente el 0-6 que le endosó Palestina en dos ocasiones, o la goleada 10-0 en Arabia. En esta fase, solo fueron capaces de ganar a Timor Oriental, una selección de nivel paupérrimo. El año pasado obtuvieron resultados vergonzantes como las derrotas con Papúa Nueva Guinea o los empates con Fidji y Macao.

Filipinas es una selección en un escalón claramente superior a los malayos y debería imponerse en el partido amistoso de mañana en el que las ganas de agradar a la afición local pueden ser decisivas. Desde mi punto de vista, las opciones de victoria de Filipinas rondan los dos tercios por lo que veo valor en esta cuota. Suerte.