Túnez viene de dos empates en fila y necesita el triunfo para clasificar de fase. En este sentido, se puede mencionar que la situación de las Águilas de Cartago en este torneo es un tanto particular, ya que el elenco de Alain Giresse conserva el invicto pero todavía no pudo ganar ningún partido en la fase de grupos. Su rival será el débil Mauritania, que ya dejó en evidencia sus fragilidades y limitaciones futbolísticas (cayó 1-4 en el debut contra Malí y luego empató sin goles contra Angola). Por lo tanto, la lógica hace presagiar una goleada de Túnez en el Suez Stadium.
El último encuentro que sostuvieron ambas selecciones se dio en noviembre del 2016. Aquél día, igualaron 0-0 en un amistoso internacional.
Túnez es un equipo superior a su rival en todos los aspectos del juego, más allá de sumar 2 empates consecutivos en el grupo. Necesita arriesgar y ser más contundente de mediocampo hacia adelante. Además recuerda que su rival no defiende bien, demostrándolo al ceder muchos goles.