En febrero del año antepasado se produjo un duelo unilateral en el que los espectadores que llegaron a Turf Moor lucieron deprimentes (0-2).

Está claro que los anfitriones son un participante de clase un poco más alta, pero las cifras actuales nos convencen de que no debemos subestimar a los invitados que saben sorprender decentemente. Esto es especialmente cierto en la etapa final, donde Kompany ha construido una pandilla interesante, cuyos ojos están en llamas y se siente un impulso increíble. Dado que no hay una necesidad significativa de centrarse en las tareas internas, esta broma también tiene algún valor. Por desgracia, no se puede decir lo mismo de un rival mucho más importante que la Premier League.

Enfrentamiento entre dos equipos que vienen con unos resultados totalmente opuestos.

Por un lado tenemos al Bournemouth que ha perdido 8 de sus 10 últimos partidos y en los que ha marcado 12 goles y ha recibido 19.
En la Premier ocupa la plaza 16º de los 20 equipos del torneo donde tiene 18 goles a favor y 39 en contra lo que hace un average de -21 goles.

El Burnley viene en buena forma, ha ganado 8 de sus 10 últimos partidos en los que ha marcado 23 goles y ha recibido 12 lo que hace un average de +11 goles.
En la Championship está líder, en dicha liga solo ha perdido 2 de los 26 partidos jugados (G16 E8 P2) y en los que ha marcado 52 goles y ha recibido 25 lo que hace un average de +27 goles.

En sus 10 últimos enfrentamientos tenemos 6 victorias para el Burnley, 1 empate y 3 victorias para el Bournemouth.
En toda la historia estos equipos se han enfrentado en 24 ocasiones de las que tendríamos 12 verdes, 6 nulos y 6 rojos.

Creo que viendo los goles que vienen anotando ambos equipos puede ser una pista de por donde podría terminar este partido, así que me voy a decantar por el equipo visitante y en caso de empate nos devuelven el dinero.