El Olympique de Marsella ha conseguido una serie de resultados positivos que han podido generar cierta ilusión en el ambiente. El conjunto de Larguet está viviendo una temporada complicada donde no acaba de encontrar su patrón de juego. Con la salida de Villas Boas estamos viendo a un Marsella algo más suelto, pero todavía tiene mucho por mejorar para poder acabar en el curso en los puestos europeos de la tabla. En estos momentos es el séptimo clasificado y con 38 puntos sumados hasta la fecha está a dos del sexto. Su próximo choque no será nada sencillo pero el hecho de conseguir la victoria ante el Lyon supondría una inyección de moral para un equipo que lo necesita. Thauvin será la única baja confirmada por lesión y Sakai por sanción.

Por el otro lado, el Olympique de Lyon está siendo un equipo mucho más reconocible respecto al Marsella. Los de Rudy García parecen ser los únicos junto al Lille que son capaces de pelear por la Ligue 1 con un PSG que lleva años dominándola. Viajará a Marsella después de haber sufrido para ganar el Brest en un partido que finalizó 2-3. Gracias a estos puntos cosechados y a que el PSG tropezó en la última jornada, el Lyon ha escalado hasta la segunda posición y son tres puntos los que le separa del líder. El domingo visitará a un equipo que no está nada fino pero que con el talento que posee está capacitado para ganar a cualquiera.