Liga rumana femenina. Segunda jornada.

Cuidado por eso. Mucho respeto a las rumanas. Mucho respeto también a este partido en horario esmorçaret del tot. La verdad es que si no fuera por ello el cuerpo pide aumentar el stake. Mantenemos la prudencia, por eso.

El caso es que las visitantes han subido en la presente temporada. Ahora cuento cómo y porqué. Y hace solo dos añitos jugaban en la Liga 3. La tercera, vamos. Ahí sí que destacaron, no en la Liga 2. Las diferencias entre las buenas y las malas de la máxima categoría son abismales. Podéis imaginaros cómo son entre un buen equipo de Liga 1 y uno normalito de Liga 2.

Decíamos de lo del ascenso. En la covidiana temporada pasada solo se jugaron cinco jornadas. Y acabó primero, sí señor. Con el filial de las clujas segundo y que no habría podido subir. Entiendo que su ascenso ha sido por esa razón. En la temporada 2018-2019 fue el equipo mediocre que decía recibiendo goleadas de los buenos de la categoría. El Piros Security, con el que hoy comparte liga y que gano aquélla, le metió un 1-9 y un 5-0. El segundo Napoca, un 1-7. Los dos le ganó bien el tercero Luceafarul. Hasta el colista Ineu le ganó 5-2. El único partido que ganó, por cierto.

El Vasas fue cuarto en la temporada abortada y sexto en la anterior tras acabar cuarto la fase regular. Su mejor resultado de las últimas temporadas ha sido el segundo de la 2017-2018. Ha comenzado el presente campeonato goleando 3-0 en casa al Heniu Prundu que no es mal equipo. Dentro de la tremenda irregularidad de esta competición entiendo que la diferencia de goles entre ambos debería reflejarse en el marcador con cardinal mayor que dos.

En la primera jornada el Banat perdió en casa con el Fortuna Becicherecu por 0-5. Las fortuna empataron con el Vasas el año pasado y el anterior perdieron ambos partidos por 4-1 y 0-5.

Reitero que a pesar de lo bien que hablan los números con estas chicas es muy recomendable lo de la precaución.

¡¡Sort!!