Sam Bradford y no Shaun Hill será el quarterback para los Vikings en la Semana 1. Con Teddy Bridgewater perdiéndose todo el año por una lesión en la rodilla, la ex primera selección global del Draft tendrá que jugar bajo su cuarto sistema ofensivo en seis años y lo tendrá que hacer apenas con menos de dos semanas de trabajo.Minnesota fue campeón divisional la campaña ’15 gracias a su defensiva. Su elenco contará con los 11 mismos titulares que cerraron el año. Mike Zimmer, su head coach, es una mente totalmente defensiva que sabe que todo empieza por frenar al rival y posteriormente correr el balón con Adrian Peterson.

Tennessee hizo mejoras sustanciales a su equipo. Jack Conklin vino producto del Draft en primera ronda a mejorar una línea ofensiva que permitió que el entonces quarterback novato Marcus Mariota fuera derribado 38 ocasiones en 12 partidos, además de Zach Mettenberger al que capturaron 12 veces en siete juegos, además de que se hicieron de dos corredores, uno de ellos en DeMarco Murray, ex líder corredor de la liga en ’14 y del ganador del Heisman en la NCAA Derrick Henry.
Ofensiva de control es lo que también Mike Mularkey quiere como entrenador en Tennessee, así que aquí el reloj va a avanzar sin parar en un juego en el que veremos más de 60 acarreos combinados.
Vs Spread:
Minnesota fue el amo de las líneas hándicap en ’15, con 14-3-0, en tanto que Tennessee fue el peor, con 4-11-1, misma marca que Dallas.
Altas y bajas marcadas en 41 puntos, cantidad que parecerían compleja de superar si nos metemos en el hecho que los Titans fueron la ofensiva 28 en puntos el año pasado, con 18.7 por partido, mientras que Minnesota fue la 16ª, con 22.8.
Los Vikings fueron el segundo mejor equipo al under de la NFL al terminar 12-4-1 a las bajas y sus partidos promediando -3.2 puntos de cómo cerraron las líneas de totales. Los Titans acabaron 9-6-1 al over y sus choques fueron en promedio +1.7 puntos por encima de los pronosticado.