Pelea en la división de peso medio de UFC.

Souza llega a esta pelea con un récord de MMA de 26-9 y de 19-8 en UFC. Viene de perder sus últimas tres peleas seguidas, pero ha sido contra luchadores de auténtica élite en el top de las divisiones.
Souza tiene un promedio de 2.53 golpes significativos por minuto y tiene una defensa del 46%. Está absorbiendo 2,85 strikes y tiene una defensa del 62%. Su lucha es una de sus principales fortalezas, con un promedio de 2.55 derribos por cada 15 minutos y 1.4 intentos de sumisión durante el mismo período de tiempo. Su precisión en derribos es del 39%, y su defensa en derribos del 60%.

Muniz llega a esta pelea con un récord de MMA de 20-4 y de 4-0 en UFC. Muniz está promediando solo 2.21 golpes significativos por minuto y tiene una precisión del 58%. Está absorbiendo 1.80 strikes y tiene una defensa del 45%. Su agarre es muy bueno, con un promedio de 2.61 derribos por cada 15 minutos y 2.2 intentos de sumisión durante el mismo período de tiempo. El problema es que su precisión de derribo es del 35% y su defensa de derribo es del 37%.

Cuestionable tanque de gasolina de Souza a sus 41 años, aunque le acompaña todavía la habilidad y la experiencia de su lado, mientras que Muniz es bastante novato todavía, aunque tiene potencial. Souza pasó el covid en mayo de 2020. Ambos solo han peleado 1 vez en 2020, pero el tiempo juega precisamente en contra de Souza.

Me preocupa bastante esa defensa de derribo de Muniz, que aunque Souza no sea el mejor efectuando derribos es experimentado. También debo destacar la capacidad de bloqueo de daño que presenta Muniz, recibiendo pocos strikes.

Cabe señalar que 18 de las 27 peleas de UFC de Souza han terminado por finish, mientras que 2 de 4 peleas de UFC de Muniz han hecho lo mismo. De hecho, 21 de las 25 peleas de MMA de Muniz han terminado por finish, así que considero que alguno de los 2 acabará por finalización con el otro, no llegándose a completar todos los asaltos.