Pelea en la división de peso gallo femenino de UFC.
Lansberg llega a esta pelea con un récord de 10-5 en MMA y de 4-4 en el UFC. Lansberg tiene un promedio de 2.76 golpes significativos por minuto y tiene una precisión del 57%. Ella está absorbiendo 3.70 strikes y tiene una defensa del 44%. Su capacidad de agarre es mediocre, con un promedio de solo 0.71 derribos por cada 15 minutos. Tiene una precisión de derribo del 33% y una defensa de derribo del 50%.
Kianzad llega a esta pelea con un récord de 16-6 en MMA y de 4-3 y en la UFC. Kianzad tiene un promedio de 5,34 golpes significativos por minuto y tiene una precisión del 49 %. Kianzad está absorbiendo 4.35 golpes y tiene una defensa del 53%. Su capacidad de lucha es mediocre también, con un promedio de 0,31 derribos cada 15 minutos. Su precisión de derribo es del 22%, pero su defensa de derribo es del 77%.
Tenemos por un lado una pelea entre dos suecas, por experiencias pasadas entre compatriotas, se suelen respetar bastante dentro del octágono.
Por otro lado, vemos como ambas prefieren una pelea de pie con intercambio sin buscar el suelo, por lo tanto, macho aliciente para que se respeten arriba, casi llegando a un tostón de combate.
La realidad es que Kianzad es mucho más joven, con mayor proyección de carrera y se la espera más ágil, proactiva y buscando puntuar. Landsberg ya está en su última etapa como luchadora, buscará un combate digno para su posible retirada ante una rival que le dará un combate digno para ello.
En resumidas cuentas, juventud de Kianzad, frente a veteranía de Lansberg, sumado a que ambas sean suecas y gusten de alargar peleas, me lleva a pensar que este combate se decide por puntos en favor de Kianzad.