Padua, rica de historia, monumentos y cultura en varias expresiones, acoge la salida de esta etapa que concluye en subida, en San Martino di Castrozza, en el Trentino.
La ciudad presenta una variedad de estilos y perspectivas caracterizadas por las cúpulas de las basílicas del Santo (Antonio, que aquí se sobreentiende, es el Santo, por definición), Santa Giustina, los pórticos largos y bajos, los sauces que bordean la avenida del Bacchiglione, el extraordinario espacio de Prato della Valle, la plaza más grande de Italia y una de las extensas de Europa (es aquí que se hicieron las primeras carreras de velocípedo en 1800): Se continúa luego por la Piazza delle Erbe, el Palazzo Comunale, Palazzo della Ragione, Duomo, Battistero, Piazza dei Signori, la Cappella degli Scrovegni con los famosos frescos del Giotto, la basílica del Santo con maravillosos bronces de Donatello y muchos otros motivos, entre los cuales el conocido Café Pedrocchi. Es secular la tradición universitaria de Padua. Es también un importantísimo centro, junto con el territorio circundante, por su actividad productiva, agrícola y comercial ofreciendo variados productos de gran calidad.
La gloriosa "Società Ciclisti Padovani", (Sociedad Ciclistas Paduanos), con un extraordinario palmarés donde figuran títulos olímpicos, mundiales y tricolores en abundancia, sobre todo en pista es la "cereza de la torta" del siempre vital y prolífico vivero paduano. Este año festeja sus cien años, igual que el Giro d'Italia. Es la sociedad organizadora de un clásico de primer nivel como el Giro del Veneto.
Micheletto en 1912, Tano Belloni ‘22, Di Paco ’36, Toni Bevilacqua ’47, Rik Van Steenbergen ’54, Francesco Moser ’78, en 1989 salida con llegada a las Tre Cime de Lavaredo (Luis Herrera el vencedor) y Quaranta en 2000 son los protagonistas para recordar del Giro d'Italia en Padua.
Perfil plano para los primeros dos tercios de la etapa que atraviesa territorios fértiles de pasiones, corredores y también actividades productivas ligadas a la bicicleta. Piazzola sul Brenta, luego la provincia de Vicenza con Nove, la bella Marostica (obligatorio el recuerdo de Giovanni Battaglin ganador del Giro 1981), la breve subida de la Rosina” - por donde pasó varias veces el Giro y otras carreras - con la pequeña iglesia de los ciclistas construida gracias a un grupo de apasionados locales "los amigos del Giro" y, en fin, Bassano del Grappa con sus particulares atractivos, son los centros principales antes de la provincia de Treviso. Se bordea la suave dorsal de las colinas por Oné di Fonte, Maser y su conocida exposición de cerezas, el cruce de Pederobba llegando a la provincia de Belluno. Feltre, Pedavena - nombre de una conocida cerveza y conocida etapa en 1964 con victoria del toscano Marcello Mugnaini - la subida del Croce d’Aune que aúna su nombre a la invención del cambio moderno. En efecto, penando en esta subida, entonces terreno desmontado - era 1927 - que el gran Tullio Campagnolo, entonces joven y modesto corredor, tuvo la intuición y la idea para la elaboración y la realización del famoso cambio que llevó su nombre (bendecido por todos los practicantes) por el mundo y que es perpetuado por la importante y homónima industria. Un monumento recordando al gran Tullio Campagnolo se encuentra en la cima del Croce d’Aune.
Se entra en provincia de Trento por Imer y en Fiera di Primiero comienza la subida, pasando por el ayuntamiento de la capital, Siror, hasta los 1466 metros de San Martino di Castrozza.
El elegante y atractivo centro de turismo estival e invernal permite la práctica del esquí, el alpinismo y el excursionismo. Ofrece una variada serie de propuestas naturales favorecidas por estructuras de hospitalidad excelentes e instalaciones modernas y abundantes. Las majestuosas y magníficas cimas del complejo dolomítico de las Pale di San Martino sobrepasan la cuenca rica de abetos. Otras metas de relieve en la zona son el paso Rolle, el parque natural Paneveggio-Pale di San Martino, la cima Rosetta, el alpe Tognola, el refugio Segantini y los lagos de Colbricon. También de un nivel excelente son las propuestas gastronómicas típicas del territorio.
Las dos anteriores llegadas de etapa fueron ganadas por extranjeros: en 1954 el holandés Wout Wagtmans y en 1982 el minúsculo grimpeur español Vicente Belda.
Primer encuentro con la montaña, primera clasificación, en todo caso, indicativa.
