Pues me voy a animar con los rebotes capturados por el más joven de la familia Ball al que ya en Estados Unidos discuten fuertemente como proximo número 1 del Draft 2020.
LaMelo como todos sabemos es un base algo atípico, ya que con su 1.98 actual tiene una envergadura más bien propia de un escolta que de un playmaker.
De hecho comparte equipo con un ilustre Ex NBA como Aaron Brooks, con el que va compartiendo las labores de dirección ya que realmente ninguno son dos bases al uso, si no que destacan más por anotar.
En el primer partido de LaMelo se fue hasta los 8 rebotes capturados en poco más de 32 minutos de juego. De hecho fue el máximo reboteador de su equipo, pese a ser sensiblemente más bajo que muchos de sus compañeros.
Necesitamos al menos 6 rebotes, una cifra alta pero no inalcanzable para LaMelo que es un jugador muy dado a engordar estadísticas y distraído defensivamente hablando.