Peñarol arranca la liga hoy en el Malvinas con ilusiones renovadas tras el sabor agridulce con el que acabó la anterior. Tras muchas jornadas en lo más alto de la tabla acabó cayendo al cuarto puesto y, lo que es más doloroso,yéndose a casa en cuartos ante Boca.

Han conseguido mantener el bloque que tan buen resultado dio la campaña anterior y va a intentar hacer de su feudo de nuevo un fortín.

El equipo de Leo llega al Malvinas sabedor de que es de esos partidos que se puede permitir el lujo de perder pero a buen seguro competirá y no lo pondrá fácil. Sin embargo confío plenamente en un Peñarol al alza que en casa es un rival temible y entró con una victoria simple en la que solo necesitamos que se vaya con ventaja al descanso para rascar una cuota cercana al par.