Los alemanes, quitando el ridículo de Valencia, están teniendo un gran inicio de temporada. El cortocircuito de los alemanes en tierras valencianas parece eso, un mal día. Después en su liga están con un camino muy serio y tras esa paliza necesitan reconducir su situación. Esa diferencia abismal les obliga a recuperar esos puntos ante posibles empates y en casa y ante uno de los rivales más débiles parece una obligación.

Ulm con Gunter al mando es un equipo muy solvente ofensivamente. No creo que los eslovenos puedan aguantar ese ritmo. Con jugadores como Babb, Rubit, Morgan, Sutton y Hobbs les garantiza una fluidez y un ritmo muy alto de anotación, con un equilibrio patente entre el juego interior-exterior. En casa más aún sacan el rodillo con mayor frecuencia.

El equipo esloveno tiene un partido muy duro. Ya perdieron ante una versión muy gris de Kuban en su propia casa y vienen de una dura derrota en prórroga ante Partizán. Han jugado cinco partidos en diez días y van a por otro en apenas 72 horas. Ese desgaste físico para un equipo con escasa rotación les costará aguantar el ritmo. Sólo Jefferson, Jankovic y Oliver están al nivel que se esperaba y me resulta un panorama muy flojo para aguantar el ritmo del rodillo alemán.

En mi opinión, armas suficientes y situación propicia para que los alemanes empiecen a reconducir su panorama en Europa y veo un triunfo cómodo, por encima de los 15 puntos.