En esta ocasión vamos a ir con un pronóstico en la LEB Oro, en este caso volvemos a encontrarnos con un equipo que sigo por motivos de trabajo (en general todos los equipos de Cataluña hasta LEB Plata los tengo vistos) y donde el trato con algunos jugadores hace que conozca de primera mano la actividad del club. Ojo, no confundáis tampoco, no estoy hablando de amaños ni nada por el estilo, sencillamente me comentan como ha ido la semana, como ven el partido y cosas por el estilo.

Centrandonos en lo que viene siendo el partido en cuestión hay que comentar que el Prat hace ya unas semanas que están muy relajados, saben que la permanencia no debería escaparse bajo ningún concepto ya que le sacan tres victorias al Huesca, equipo que marca la zona de descenso si tenemos en cuenta que el Barcelona B con los fichajes que ha realizado va a salir del pozo con total seguridad, y tienen los playoffs de ascenso a cuatro victorias por lo que se encuentran en tierra de nadie y eso se ha notado en los entrenamientos ya que cabe recordar que la mayoría de estos jugadores a pesar de cobrar tienen mucha más vida más allá del baloncesto.
Esta desgana, por llamarlo de alguna manera, ha provocado que el Prat haya perdido 5 de los últimos 6 partidos que ha disputado ganando solo ante el Lleida en un partido donde Forcada estuvo excelso y donde en general al equipo se le vio muy bien, sin embargo cabe decir que este equipo puede tener grandes días y ganar a casi cualquiera pero en la mayoría de partidos se muestran un equipo más bien flojo.

Su rival en cambio si que esta en la lucha por los playoffs de ascenso, el Oviedo se encuentra en la sexta posición de la liga y si bien ha perdido 4 de los últimos 5 podríamos estar hablando perfectamente de 4 victorias o incluso 5 ya que de estas cuatro derrotas tres de ellas se produjeron en la prórroga mientras que la otra fue por solo dos puntos en la complicada pista del Lleida.

Para mi la racha del Oviedo es más bien cuestión de detalles mientras que la del Prat es sintómatica de las pocas ganas con las que afrontan este tramo final de temporada sabiendo que no hay objetivos en juego y que a poco que ganen algún que otro partido estarán salvados.