Mañana se disputará la última etapa de esta accidentada edición de la Vuelta al País Vasco, una etapa de solo 138 kilómetros pero con tres puertos de primera categoría, entre ellos el puerto de Izua, una pared de 4 kilómetros que se corona a 27 de meta y donde debería terminar de decidirse todo.

Debido a la grave caída del otro día, y a los abandonos de Vingegaard, Roglic y Evenepoel, la carrera se ha quedado sin los grandes favoritos y parece que la general se la disputarán el danés y líder Skjelmose por un lado, y varios de los corredores del equipo UAE por el otro, entre ellos el fenómenos español Juan Ayuso. El danés tiene un buen equipo pero mañana lo va a tener muy complicado para controlar la carrera, en la etapa de hoy UAE lo ha intentado una y otra vez con ataques del mexicano Del Toro y del americano McNulty y en algunos de ellos ha tenido que responder Skjelmose en persona mientras Ayuso iba a su rueda. Según el director del equipo la idea era esa, empezar a desgastar al danés y que Ayuso tuviera una jornada tranquila tras la caída del otro día. En esa caída Ayuso no se hizo nada grave salvo algunas abrasiones pero ha tenido dos días muy tranquilos para recuperar sensaciones. Skjelmose es un corredor muy explósivo y buen escalador, pero suele acusar la acumulación de esfuerzos y las etapas con muchos puertos seguidos como la de mañana.

En resumen, Ayuso está tercero a 4 segundos de la general, es el mejor escalador puro de los corredores que quedan tras todos los abandonos que ha habido, y cuenta con el mejor equipo a su disposición para controlar la carrera. También existe la posibilidad que UAE decida jugar otra baza de las varias que tiene pero por lo visto en la etapa de hoy la idea principal es ganar con Juan Ayuso y a esta gran cuota hay que probarla.