Primera ronda del Challenger de Túnez, disputado sobre arcilla.

Ninguno de ellos llega en su mejor momento, pero hay matices que me llevan a confiar en la victoria del georgiano mañana.

Basilashvili ha estado bastante mal físicamente durante los primeros 2-3 meses del año llegándose a retirar un par de veces por molestias en el hombro.
Tras su última retirada, volvió en Miami donde venció a Fabbiano y cayó ante Anderson. Luego se estrenó en la gira de arcilla la semana pasada en Marrakech, donde venció a un siempre complicado Berretini y a la revelación local Ouahab, para caer en QF ante Sousa, y dando muestras por tanto de su pleno estado de forma y que prácticamente ya tiene ritmo de competición.
Ganador de varios Challengers sobre esta superficie e incluso siendo finalista de un ATP250 hace un par de años y semifinalista el año pasado en el ATP de Lyon.

Kamke debutará en clay esta temporada. Ha alcanzado este año una F y varios QF en diversos Challenger sobre indoor, pero desde comienzos del año pasado ya se le ha notado una bajada en sus prestaciones, haciéndole caer hasta más allá de los primeros 200 puestos del ranking.

El h2h arroja dos partidos, ambos ganados por Basilashvili.

El nivel técnico de Basilashvili es infinitamente superior al de Kamke. Se antoja necesario que el georgiano le ponga muchas bolas en juego al alemán desde el resto, pues una competencia de ver quien saca mejor hará que Kamke tenga más posibilidades de las que debería.