Empieza el torneo más peculiar de los últimos tiempos y vamos a ver si podemos sacar partido de la inexperiencia de las bookies en un evento nuevo

El Next Gen finals se juega al mejor de 5 sets, los sets son a 4 juegos (tie break en el 3-3), no hay ventaja en los juegos (como en dobles), no hay let en los saques, hay reloj entre puntos, hay libre movimiento de los espectadores por la grada, calentamiento muy corto (5 minutos tarda en empezar el partido desde que llegan los jugadores) y no hay jueces de línea.

Todo para que sea más rápido pero también más igualado. Y es ahí donde nos beneficiamos para este pick. Esas reglas hacen que se igualen los partidos, con las variantes del deciding point en el 40-40 y el no let puede pasar cualquier cosa. Además son sets cortos y hay más opciones que el no favorito se lleve uno.

Y por eso creo que aquí debe haber más de 21 juegos. Nos debería bastar con que Quinzi ganase un set de estos. En la casa prohibida está el over 20.5 que nos cubre 3 tie breaks y algun marcador a 4 sets con pocos juegos.

Rublev es superior a Quinzi hoy día, no hay duda de eso. Pero Quinzi en su día prometía igual o más, ganó Wimbledon junior hace unos años y aún está a tiempo de hacer cosas desde luego, este año ha sido semifinalista de challenger pero las lesiones y problemas de regularidad le han frenado algo. Así que aunque no plante cara a los top como sí lo hace Rublev, no hay tanta diferencia entre él y el ruso.

Además está por ver la motivación de Rublev una vez cobrado el cheque, es un jugador que a veces se le va la cabeza y Quinzi ya está adaptado a estas reglas nuevas y a las condiciones del torneo, ha jugado un clasificatorio para obtener la invitación que le ha permitido estar en el torneo, juega en casa y querrá demostrar, pese a estar algo olvidado, que forma parte de esa Next Gen y que no es tan inferior que los demás