Partido entre conjuntos asturianos en que el Marino de Luanco recibe al filial del Sporting de Gijón. Aparentemente el favoritismo es para el conjunto local, que hasta la fecha solo ha perdido un encuentro como local -la pasada semana ante el lider, el Avilés-, pero aparte de desglosar a continuación esos números en Miramar, me baso sobre todo en una situación acontecida esta semana. El jueves los integrantes de la plantilla tuvieron en Gijón la habitual cena de Navidad y terminó como el Rosario de la Aurora. Un grupo de jugadores se enzarzó a altas horas en plena calle con otra pandilla de jóvenes, y en la intervención policial para disolver la pelea uno de los futbolistas agredió a un policía, siendo detenido. También detuvieron a otro miembro de la plantilla cerca de su casa por volcar con el coche, ¡iría fino! Los susodichos son Adrián Cruz y Pablo Espina, más unos cuantos que estuvieron con ellos toda la noche.

Con ese panorama entrenaron el viernes por la mañana, y hoy sale la noticia en la prensa regional. No ha sentado nada bien como es obvio entre la afición, y los ánimos se han caldeado bastante pese a la buena marcha deportiva, por lo que mañana un comienzo malo podría provocar que se echen encima de ciertos jugadores y la grada sea un polvorín para los suyos.

En casa solo han perdido un encuentro, por cuatro victorias y tres empates. Sin embargo no han tenido rivales de entidad, pues aparte del Avilés que les ganó 0-1, el resto de equipos que ha visitado Miramar está igualado o por debajo de los luanquinos, por lo que ese registro puede ser un poco engañoso.

Enfrente estará un Sporting B irregular, como buen filial. Eso puede ser beneficioso porque es un equipo que sale a jugar al fútbol en cualquier circunstancia, con el peligro que ello conlleva. Es un conjunto ofensivo, que juega muy bien la pelota y no renuncia a ella jamás. Apenas tiene bajas para este compromiso y quieren resarcirse de la derrota en casa el pasado fin de semana ante el Coruxo en un encuentro que merecieron ganar sobradamente. Este año han vencido a equipos como el Tenerife en casa o el Madrid C a domicilio, por lo que está claro que tendrán sus opciones, y si aprovechan esta circunstancia extradeportiva que afecta al Marino pueden llevarse la victoria.