Voy a cerrar mi lista de proposiciones con una cuota al límite del valor. La verdad es que esperaba ver unas décimas más en este pronóstico. Aún así, creo que tengo una buena lectura de la pelea y no me voy a echar para atrás.

Parece mentira que en 2019 sigamos apostando por Jim Miller. Su cuota actual se me queda realmente corta. La lógica de las últimas actuaciones de uno y otro me dice que debería ganar, pero la verdad es que acorde a los estilos, no es un encuentro en donde me sienta cómodo respaldando al favorito. Por eso, desde el principio tenía pensado probar este mercado.

Tenemos por un lado a Jim Miller, uno de los mejores grapplers estadounidenses que podemos encontrar actualmente. Existen factores innegables que debemos tener en cuenta de cara a esta apuesta. Nuestro hombre lleva una extensa carrera a sus espaldas. Se ha enfrentado a lo mejor que este deporte ha producido en las 155 libras convirtiéndose en un luchador realmente querido por la grada dada su entrega. Nunca llego a rozar el oro, pero durante años fue un luchador relevante en la división, afianzándose en el Top 5 durante casi una década, y logrando el récord como luchador con más peleas dentro de la UFC. Datos así únicamente son dignos de guerreros de elite.

Durante los últimos tiempos hemos visto la peor cara de Jim Miller. Las lesiones le han destruido y ha mostrado una fragilidad preocupante. Curiosamente, a finales de 2018 aseguró haber subsanado gran parte de sus problemas médicos, ofreciendo desde entonces una mejora destacable en sus actuaciones más recientes. No creo que volvamos a ver su mejor versión, pero al menos me aporta cierto optimismo en combate entre veteranos como el que tenemos entre manos.

Su rival será otro peleador con toda una vida dentro de los octógonos. 53 peleas como profesional son la mejor carta de presentación que podemos hacer de Clay Guida. Wrestler por excelencia. Belicoso, experimentado, valiente y constante. El Guida del pasado tendría otras características, pero su versión más madura se centra en el control posicional. Y creo que ese estilo que trae consigo puede poner en serios apuros la victoria de Miller. Presión constante, achicamiento de espacios y dominio contra la reja con intentos de derribos encadenados. Ahora bien, no debemos olvidar que Guida se encuentra en los últimos compases de su carrera, y su versión actual no ofrece ningún tipo de garantías. De hecho, sufrió más de los previsto ante toda una caricatura de lo que fue como BJ Penn.

La clave de este pronostico se fundamenta en el historial de ambos. Miller posee un grappling maravilloso. Es capaz de finalizar cualquier pelea tras un mal movimiento. Grappler metódico y diligente, que explotará el más mínimo error que cometa su oponente. Y curiosamente, Clay Guida tiene una sospechosa tendencia a exponerse en transiciones cuerpo a cuerpo. Charles Oliveria, Thiago Tavares, Dennis Bermudez, Kenny Florian, Roger Huerta… Muchos son los nombres que han sometido a Guida a raíz de un simple error, y probablemente, solo el primero pueda fardar de un jiu jitsu superior al de nuestro hombre.

No es la apuesta que más me enamore, de ahí este stake superfluo. Pero no me quiero quedar al margen de lo que podría ser otro desliz del bueno de Guida. Más aún teniendo en cuenta sus pésimas actuaciones más recientes, o los ligeros atisbos de esperanza que ha desentrañado Miller.

Stake 0.25 - @3,50 en todas las bookies que ofrecen este mercado.