Tras el punto y final en la Champions para el Atlético de Madrid ya solo le queda un objetivo, la liga. Ganarla es casi un imposible, pero el objetivo está claro, acabar tercero y evitar la previa en agosto. Y hay que ganar, porque Valencia y Sevilla no están fallando mucho, y cualquier error puede condenar a los de Cholo. Reciben a un Elche que lucha por la permanencia, pero que llega con 6 puntos de ventaja sobre la zona del abismo, faltando 6 jornadas en juego.

El partido se puede hacer largo, ya que tras el partido del miércoles no habrán pasado ni 72 horas para descansar. Y eso se puede notar en el físico de los jugadores en el segundo tiempo. Por eso el equipo tiene que salir a por todas de inicio. Tampoco es algo novedoso, el equipo sale siempre a buscar el gol desde el inicio cuando juegan en el Calderón. De hecho, suele irse con victoria parcial al descanso, marcando un buen puñado de goles. Es más, en lo que va de temporada, ha marcado en todos sus encuentros de local a excepción del partido ante el Villarreal, cuando perdió 0-1 en plena crisis por el altercado entre el Frente Atlético y los Riazor blues, que con un ambiente gélido el equipo no encontró el camino del gol.

Pues salvo ese partido ante el Villarreal, en todos los demás ha marcado el equipo, y hablo de 15 de 16 encuentros. De los 15 en los que ha metido gol, en los 15 ha marcado en el primer tiempo, obteniendo 25 goles antes del descanso y 14 tras el paso de vestuarios. Son números demoledores, que deja patente en estadística lo que se ve en el campo, un equipo que sale a matar el partido cuanto antes, con jugadores que presionan al rival y que juegan con intensidad y buscan rápido el gol.

Si estos números aún parecen poco, hay que decir que de esos 15 partidos en los que el Atlético marcó antes del descanso, en los 15 se fue ganando al descanso. Eso sí, el hándicap que jugamos en este partido lo superó en 7 encuentros, siendo en 8 un void, lo que sería una devolución de la inversión. Si la tendencia sigue como hasta ahora, cuanto menos no perderíamos la apuesta, por lo que existe un alto value a la cuota que se nos da.

Fuera de estadísticas hay que ver a los equipos, el Atlético estará jodido tras lo de la Champions, pero el Cholo es un entrenador que sabe motivar a los suyos, y lamentarse ante una derrota no sirve de nada si no saben levantarse en el siguiente encuentro. La liga es lo único que hay en juego, hay que ir partido a partido, y el siguiente es este. Hay que ganarlo sí o sí, la afición apoyará a los suyos y querrá que saquen billete directo para la próxima Champions para poder optar a ganar la Orejona. Deberían sentenciar pronto el encuentro, sabiendo que a partir del minuto 60 entrará el bajón físico, de manera que si el partido ya está sentenciado se puede controlar el partido y dejar que pase el crono.

El Elche llega al Calderón derrotado de antemano. No lo digo yo, ni su entrenador ni sus jugadores, pero la actitud que demuestra la plantilla me deja esa sensación. En el partido del lunes ante la Real Sociedad 3 de sus titulares forzaron la tarjeta amarilla para descansar ante el Atlético y estar disponibles para los demás partidos, donde Escribá y los suyos se van a jugar la permanencia. Las dos victorias recientes han dado un respiro al club y les permiten el lujo de relajarse en este encuentro y centrarse en el del miércoles que viene ante el Depor en el Martínez Valero que sí será de vitar importancia, pues de ganar dejarían a un rival directo a más distancia y se pondrían con un importante colchón de puntos.

El Elche ante los equipos de arriba ha perdido en todas las visitas. Son equipos del nivel del Atlético, así que todo apunta hacia una nueva derrota holgada. Los resultados ante los de arriba han sido un 3-0 ante el Sevilla (2-0 al descanso), 3-1 ante el Valencia (2-0 al descanso), 5-1 ante el Real Madrid (3-1 al descanso) y 3-0 ante el Barcelona (1-0 al descanso).

La estadísticas son muy favorables, lo que hay en juego y la forma en la que va a salir cada equipo invita a que se cumpla el pronóstico, y la diferencia de calidad entre unos y otros es enorme. De manera que vamos con esta victoria colchonera en el descanso con una cuota que supera el par.